La degradación ambiental gana cada vez mayor importancia como causa de las migraciones humanas. Dicha degradación ambiental toma diversas formas: terremotos, tsunamis, ciclones, construcciones de represas hidroeléctricas. Las cifras indican que se trata de un fenómeno de grandes magnitudes (predominantemente en las naciones pertenecientes al Sur global). Los impactos del cambio climático son cada vez más importantes y constituyen una causa más de las migraciones actuales que interactúa con el resto e incluso las potencia. Uno de los problemas más graves a los que se enfrentan quienes migran por motivos ambientales es el escaso reconocimiento de su situación en tratados internacionales y a nivel interno. Por lo tanto, resulta imprescindible entender la complejidad de las migraciones ambientales, para el que no existen soluciones sencillas. La enmienda o adaptación de los tratados y otras normativas son opciones viables que deben continuarse explorando.